Informe especial: Ucrania
A lo largo de este conflicto, hemos observado que los ciberactores rusos del estado nación llevan a cabo intrusiones junto con acciones militares cinéticas.
Al menos seis actores rusos de Amenaza avanzada persistente (APT) y otras amenazas no atribuidas, han llevado a cabo ataques destructivos, operaciones de espionaje o ambas cosas, mientras las fuerzas militares rusas atacan el país por tierra, mar y aire. No está claro si los operadores de la red informática y las fuerzas físicas se limitan a perseguir de forma independiente un conjunto común de prioridades o se coordinan activamente. Sin embargo, colectivamente, las acciones cibernéticas y cinéticas actúan para perturbar o degradar las funciones gubernamentales y militares ucranianas y minar la confianza del público en esas mismas instituciones.
Los ataques destructivos han sido un componente destacado de las operaciones cibernéticas rusas durante los conflictos.
Un día antes de la invasión militar, operadores asociados al GRU, el servicio de inteligencia militar de Rusia, iniciaron ataques destructivos contra cientos de sistemas de organizaciones gubernamentales, informáticas, energéticas y financieras ucranianas. Desde entonces, la actividad que hemos observado ha incluido intentos de destruir, perturbar o infiltrarse en redes de organismos gubernamentales y en una amplia gama de organizaciones de infraestructuras críticas, que en algunos casos han tenido como objetivo las fuerzas militares rusas con ataques terrestres y ataques con misiles. En ocasiones, estas operaciones de red no solo han degradado las funciones de las organizaciones objetivo, sino que han tratado de perturbar el acceso de los ciudadanos a información fiable y a servicios vitales críticos, y de hacer tambalear la confianza en los dirigentes del país.
Basándose en los objetivos militares rusos para la guerra de la información, es probable que estas acciones estén dirigidas a socavar la voluntad política de Ucrania y su capacidad para continuar la lucha, al tiempo que facilitan la recopilación de información de inteligencia que podría proporcionar ventajas tácticas o estratégicas a las fuerzas rusas. A través de nuestros compromisos con los clientes en Ucrania, hemos observado que los esfuerzos informáticos de Rusia han tenido un impacto en términos de interrupción técnica de los servicios y provocando un entorno de información caótico, pero Microsoft no puede evaluar su impacto estratégico más amplio.